Si un día te da una loca bondad de llorar... llámame. No te prometo hacerte reir, mas puedo llorar contigo. Si un día resuelves huir; no te olvides de llamarme. No prometo convencerte de que te quedes, mas puedo huir contigo. Si un día te da una loca bondad de no hablar con nadie; llámame de igual manera. Prometo quedarme bien quieto pero... si un día me llamas y no respondo... ven corriendo a mi encuentro, tal vez yo este necesitando de ti...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario